Ubicado en pleno corazón del país entre el Parque Nacional de Durmitor y el macizo de Bjelasica, la región de Krnovo es una maravillosa zona salvaje y desértica que recuerda a Mongolia (y recibe su apodo de "pequeña Mongolia"), por sus paisajes de altas mesetas y llanuras verdes rodeadas de colinas redondeadas.
La región de Krnovo se revela como el paraíso para los cicilistas, los amantes del motocrós o el parapente. De hecho tuve la oportunidad de recorrer una parte de estas enormes llanuras con una bicicleta de alquiler, y debo decir que fue una experiencia memorable. Los paisajes deshabitados que se extienden hasta donde se pierde la vista me hicieron tomar consciencia del potencial natural de Montenegro, en especial en las tierras del interior del país, que a veces están muy poco aprovechadas, pues todas las inversiones se concentran en la costa.