Una caminata de dificultad media que conduce al pueblo monástico de Dodena (también llamado Dorjidra), uno de los monasterios más cuidados de Bután. Siuado a solo dos horas de caminata por encima de Thimphu, es también un remanso de paz paradisíaco y encantador.
Dodena no es un lugar turístico. Algo que la hace de especial interés, aparte de su entorno natural. Eso nos dio una oportunidad única para descubrir la verdadera vida monástica e interactuar con los jóvenes monjes residentes. Son comunicativos y hablan muy bien el Inglés, y estuvieron felices de recibirnos. El monasterio dispone de habitaciones para huéspedes. Pasa una noche arrullado por el viento y las oraciones de los monjes, mientras la oscuridad se cierne suavemente sobre la capital, más abajo.