Situada en el corazón de la región de Andalucía, en un paisaje desértico, Andújar es una ciudad pequeña. No hay monumentos excepcionales que justifiquen una visita. Los autóctonos todavía están impregnados de tradiciones antiguas y la religión tiene un papel aún bastante significativo (lo notarás en las pocos peregrinaciones que se realizan). Este espíritu es lo que mejor caracteriza la ciudad.
Durante mi estancia en España, mi recuerdo más vívido de Andújar es el del calor agobiante que hizo difícil el paseo por las calles estrechas y empinadas. Si bien la ciudad no merece la pena una visita, te aconsejo que vayas al cercano Parque Nacional Sierra de Andújar, con un hermoso paisaje natural que rodea al río Guadalquivir, y que sigue siendo el hogar de lince ibérico.