Viajar a Groenlandia no es algo que sea muy común precisamente, este país no suele formar parte para nada de los destinos clásicos del turismo mundial. Si has elegido este destino, sólo puede significar que ya tienes un espíritu más que aventurero, y además una insaciable sed de explorar los territorios más alejados.
Desde luego, y en primer lugar, te hará falta llevar ropa que abrigue muy bien, caliente, gruesa y cómoda, para enfrentarte al frío glacial y polar que tendrás que soportar cuando llegues allí. Un buen abrigo, suéteres de lana, camisetas de manga larga, un buen sombrero y bufanda a juego, un par de guantes, gafas de sol para protegerte de los reflejos solares en el hielo y calcetines gruesos; todo esto tendrá que estar, sí o sí, de forma imperativa en tu equipaje. Mete zapatos cómodos para caminar. Si deseas bucear en las aguas glaciales no te preocupes, ya que podrás alquilar allí mismo todo el material, el idóneo y perfecto para vivir una experiencia inolvidable.
En el botiquín que debes llevar, incluye los medicamentos y productos básicos para los malestares menores más habituales. Eso sí, lleva bastante bálsamo protector labial, y una buena crema solar de máxima protección (tanto el sol como el frío y el viento se alían para que puedas sufrir quemaduras y grietas en la piel). Lleva así mismo la Tarjeta Sanitaria Europea, te podrá ser muy útil en caso de problemas mayores.
Lleva una cámara de fotos y/o de vídeo para traer de vuelta los mejores e irrepetibles recuerdos de este viaje. También te harán falta tarjetas de memoria para guardarlas. Mete un adaptador eléctrico de tipo K para cargar tus baterías. No te olvides fotocopia de tu documentación personal y permiso de conducir internacional, por si deseas alquilar un coche.
En cuanto a la forma de pago, se utiliza la corona danesa. Podrás cambiar euros por la moneda local en efectivo al llegar al país, ya que la tarjeta de crédito está limitada a ciertos establecimientos.
Como Offer Developer en Evaneos, diseño experiencias de viaje responsables e inspiradoras junto a agencias locales de todo el mundo. Construyo carteras alineadas con las expectativas del viajero y los valores B Corp que nos guían: sostenibilidad, autenticidad e impacto positivo. Mi trayectoria combina comunicación, innovación con propósito y visión intercultural.