Como no disponía de mucho tiempo, decidí descubrir la Tramuntana haciendo un road-trip de un día entre Port de Pollença e Inca. El itinerario comenzaba en Cala Sant Vicenç, una pequeña cala ubicada a diez minutos del puerto. Enseguida la carretera comenzó a ascender y pudimos disfrutar de un impresionante paisaje montañoso. Me sorprendió descubrir numerosas fincas vinícolas en este rincón de la isla. Muchas de ellas se dedican al agroturismo y tienen ofertas de alojamiento para participar en los trabajos en los viñedos.
Continuamos por la carretera que asciende hasta el Monasterio de Lluc y luego desciende hacia Sa Calobra. Luego tomamos dirección a Inca atravesando extensos valles escarpados. Nos detuvimos un momento para admirar los olivares en terraza. Jamás me hubiera imaginado que iba a acabar disfrutando de estos paisajes en mi viaje a las Islas Baleares. Si te gusta hacer senderismo, no puedes perderte el Puig Major, el pico más alto de la isla con sus 1445 metros.