Mi estancia en Korbous fue agradable y tranquila. Me gustó pasearme a lo largo de los acantilados que rodean esta simpática aldea. Las fuentes de agua termal le han dado la fama a Korbous, así como su "hammam" (especie de baño turco) y un spa de lo más agradable con sus masajes tonificantes y relajantes. ¡Verdaderos himnos al relax!
Te recomiendo la célebre fuente de Aïn El- Atrous: su agua caliente desemboca en el mar y forma pequeñas capas de agua, especie de pequeñas piscinas, muy apreciadas por los nadadores.
Para seguir tu excursión, te aconsejo la playa Soliman, a varios kilómetros de Korbous. Una hermosa playa de arena blanca y cálida, que enlaza con un espléndido paisaje montañoso. La playa es de muy fácil acceso, de ahí su gran popularidad, sobre todo los fines de semana: ¡la playa Soliman está entonces a tope de gente!