Un verdadero jardín entre mar y montaña, el golfo de Saint-Florent alberga no solamente la bonita ciudad de Saint-Florent, sino también todo un rico y variado paisaje. Cerca del desierto de Agriates (que no tiene nada de desierto), se encuentran unas playas excepcionales.
A partir de Saint-Florent, se puede tomar el barco para ir hasta la playa de Lotu. También se puede acceder durante cuatro horas de caminata por el camino costero que por otra parte es una hermosa ruta de senderismo. Sea cual sea el medio que elijas para llegar, será una experiencia única, ya que se trata de una playa salvaje. No hay nada más que vegetación, arena y el azul del mar. Te recomiendo llevar agua suficiente y unas cuantas provisiones para disfrutar bien de la naturaleza. En mi opinión, este es un lugar imprescindible que debes ver durante un viaje por Córcega.