El lago Torneträsk se encuentra en el inmenso municipio de Kiruna. Por su forma singular y su proximidad al coqueto pueblo de Abisko, es uno de mis sitios preferidos de la región.
Cuando fui, me encantó caminar por el lago congelado durante una bonita tarde de invierno, y me detuve a observar a los habitantes locales pescando a través del hielo. Un poco después, también me fascinaron las numerosas cabañas situadas sobre su propia superficie, lo que demuestra la gran resistencia del hielo nórdico.
Además, este lago es especial para mí porque desde allí vi las auroras boreales más bonitas del invierno pasado. Y, para poner la guinda a este estupendo recorrido por la región, incluso nadé un poco en el agua congelada al salir de una sauna pública al orillas del lago.