Bajram Curri es una pequeña ciudad situada al noroeste de Albania, zona tan montañosa como repleta de misterios, ya que los inspira. Lleva el nombre de un héroe albanés que luchó a comienzos del siglo XX por la independencia de Albania. Se dice que en esta región siguen aún vigentes las tradiciones ancestrales de la vendetta, y que se trata de un territorio usado como base por la mafia local.
No pude comprobar si es así o no durante mi paso por la zona, pero tampoco recomiendo dedicar demasiado tiempo a este lugar, ya que la ciudad tiene un aspecto muy corriente, a pesar de contar con una bella mezquita y una calle histórica. Situada en el corazón de las montañas, Bajram Curri continúa sin embargo siendo una excelente puerta de entrada al parque nacional del valle de Valbona, región absolutamente impresionante situada en los márgenes de Europa: un lugar que se ha de visitar en medio de un viaje por Albania.
En realidad, esta ciudad no es muy interesante, ya sea desde el punto de vista del paisaje, la arquitectura o culturalmente hablando. En efecto, el estilo comunista de los edificios, gris y sin gran originalidad, no contribuye al encanto de la ciudad.
Sin embargo, la ciudad de Bajram Curri tiene el mérito de ser una base excelente entre el valle de Valbuena, el lago de la región de Koman y la entrada en Kosovo. Eso la hace una etapa interesante para un viaje a través de los Balcanes.
Efectivamente encontrarás aquí algunos hoteles de categoría 3 estrellas (de acuerdo con la normativa del lugar) gracias a los cuales podrás pasar confortablemente la noche a fin de ir temprano al día siguiente a Kosovo, el lago de Koman, o bien Tirana ya que esta ciudad está igualmente muy bien servida por las famosas furgonetas locales de Albania.