Pasé por Brestovitsa al bajar desde las gargantas del Vacha, cuando iba camino de Plovdiv. Me gustó mucho el sitio donde estaba la aldea. Es una llanura en un lugar estratégico donde crecen las vides. Brestovitsa está al final de un valle pequeño, al bajar de los Ródope. Tiene un aspecto ameno y meridional.
Vista desde fuera, la iglesia ortodoxa de Brestovitsa no llama especialmente la atención, pero sería una lástima que te perdieras el iconostasio del interior. Es obra de un pintor famoso del S. XIX, el búlgaro Dimitar Zograf.
En ese paisaje transitorio entre el valle y la montaña, las colinas de alrededor te invitan a descubrirlas a pie. Desde las cumbres que dominan Brestovitsa, aunque no son altas, tienes unas vistas perfectas de Plovdiv y su núcleo de población (siempre y cuando el día esté despejado), en el centro mismo de la meseta de Tracia.