Cuando llegas a Arrieta desde Haría te vas acercando cada vez más al mar, hasta que aparece ante ti un pueblecito de casas blancas en medio de un paisaje de roca negra volcánica. Hay dos playas en el pueblo. La más conocida es la de la Garita, una playa natural. Luego hay otra, que se ha construido artificialmente. Si entras en el pueblo, pasarás por una casa azul, la Casa Juanita. No está en la colina, sino en una lengua de tierra que se mete en el mar. Tiene una arquitectura muy peculiar y fotogénica.
Por la zona de Arrieta está una de las mayores atracciones de la isla de Lanzarote: los Jameos del Agua. Son grutas subterráneas transformadas por la mano del artista canario César Manrique hasta dar lugar a uno de los lugares más insólitos de Lanzarote.