A 30 kilómetros al noreste de Budapest se encuentra este palacio del siglo XVIII. El exterior del Palacio de Gödöllő es impresionante; aun así, el interior conserva bastantes secciones originales, con alguna que otra zona en remodelación o restauración. Es por esta razón que más bien os recomiendo que en su lugar visitéis otros palacios, como el de Viena; así podréis apreciar mejor la belleza de las construcciones de los Habsburgo en todo su esplendor.
Hice una visita guiada que fue muy satisfactoria. Si bien es cierto que todas las salas del palacio contienen placas informativas en varios idiomas, los guías siempre os aportarán ese plus de anécdotas y datos de las cosas que ocurrían en estos lugares. Si queréis ir allí por vuestra propia cuenta, la mejor opción es que vayáis a la estación central Keleti en Budapest; allí hay toda una red de trenes con una buena frecuencia horaria que os resultará muy práctica.