Es difícil tener información precisa sobre los lejanos orígenes de este pequeño país. A partir de entonces, fue el escenario de numerosas invasiones, un protectorado francés y, finalmente, desde su independencia, ha vivido revoluciones y períodos más turbios.
Los orígenes de la independencia
Los primeros habitantes de Laos datan de hace más de 10.000 años. Ellos podrían ser el orígen de los pueblos del Pacífico. Más adelante, Laos estuvo poblada por los jemer y por los tailandeses. Laos, llamado también el reino del millón de elefantes, fue el escenario de numerosos conflictos entre estos dos pueblos. Posteriormente, chinos, siameses, vietnamitas y camboyanos dividieron el país. Numerosas guerras han tenido lugar en Laos, a fuego y sangre. Se destruyeron los templos y los budas sagrados fueron robados. En 1893, en lugar de someterse a la soberanía del rey siamés de Luang Prabang, buscaron la protección de Francia. Los franceses aprovecharon la oportunidad de reconstruir Vientiane, pero descuidaron el desarrollo futuro del país. Con la ayuda de Tailandia y Japón, Laos se convirtió en país independiente en 1945.
Desde la independencia hasta nuestros días
El ejército popular de liberación del pueblo laosiano tomó el control de varias provincias. Los intentos del sindicato de llegar al poder fallaron, los problemas se intensificaron y el gobierno incluso recibió la ayuda de Estados Unidos para prevenir el golpe de estado de Kong, en 1960. Los comunistas se convirtieron, cada vez, en una fuerza más importante, lo que, necesariamente, no agradaba a Estados Unidos, que no dudó en inundar todo el norte y el este del país con bombas. El alto al fuego de 1973 permitió a los comunistas tomar el control de la mayoría del país. Los opositores políticos se vieron obligados a huir. Dos años más tarde,el Partido Popular Revolucionario de Laos comenzó a gobernar, sin ningún tipo de oposición posible. Basta con decir que la represión fue realmente fuerte durante esa época. Desde 1980, la situación parece estar mejorando gradualmente. Aunque el país, finalmente, logró mantener relaciones normales con sus vecinos, la oposición política sigue estando prohibida y solo un partido, el comunista, tiene derecho a existir en el territorio.
