El Jebel Shams es una de las cumbres más altas del Golfo. Aunque está relativamente aislado, la carretera que sale del pueblo de Al Hamra es bastante buena, y nos permite llegar a la cumbre sin demasiadas dificultades (salvo al final del recorrido, donde la carretera se transforma en pista). Como la carretera es buena, sin demasiado tráfico y amplia, se puede parar para hacer un picnic, contemplar el valle más abajo, o sencillamente para soñar despierto.
Al final de la pista, un aparcamiento nos indica que hemos llegado. Hay algunos habitantes que venden recuerdos y artesanía. Tenemos que atravesar los diferentes puestos para llegar a un camino de senderismo que pasa por un desfiladero impresionante. Este camino no es demasiado difícil, y podemos volver atrás en cualquier momento si nos sentimos cansados. Durante todo el camino, el paisaje casi lunar, es realmente extraordinario. Incluso se pueden ver algunas aves rapaces dando vueltas por encima del precipicio. Para los aficionados al senderismo y la naturaleza, el Jebel Shams es realmente una visita obligatoria durante un recorrido por Omán.