Una de las ocho iglesias de madera de Rumanía, inscritas en la lista del Patrimonio Mundial de la UNESCO, es el monasterio de Santa Parascheva, auténtica maravilla arquitectural. Levantada en 1770, la iglesia se construyó empleando solamente madera, tal y como requiere la tradición, sin emplearse ningún clavo u otro material. Su particularidad está en el campanario, particularmente alto y estrecho, que apunta directamente hacia el cielo. Si quieres visitar la iglesia, encontrarás en la puerta varios números a los que podrás llamar, tratándose a menudo de habitantes de las casas vecinas.
El pueblo de Harnicesti es absolutamente encantador, con bonitas casas tradicionales propias de la región de Maramures y un ambiente por entero rural, como en el resto de la región. En definitiva, una buena opción para cualquiera que pase por Maramures durante su viaje por Rumanía.