Sibiu es, sin lugar a dudas, una de las ciudades más bellas de Rumania. Deambular por su coloridas calles te permitirá admirar el magnífico patrimonio que ofrece esta "Pequeña Viena", tal y como se la llama.
Aconsejo:
Piérdete, explora al azar los pasajes y las escaleres: ¡no te decepcionará!
Mi opinión
¡Soy fan de Sibiu y te aconsejo disfrutar de sus numerosos atractivos turísticos durante tu viaje a Rumania! Ya sea la plaza mayor, la plaza pequeña o la plaza Huet, el encanto de la ciudad antigua de Sibiu surte efecto. La vista de la Torre del Consejo ofrece una vista panorámica de las tres plazas y, sinceramente, ¡es magnífica! La armonía de los tejados de tejas roja, las calles pavimentadas y las fachadas pastel ofrecen una vista fascinante. Preferí la plaza pequeña pues los antiguos edificios medievales y barrocos tienen una belleza auténtica y las pequeñas cafeterías que se han instalado allí atraen a los visitantes. Se ve el puente de las mentiras que me pareció realmente romántico (¿se parece a Venecia?) pero su leyenda no lo es. Al caer la noche, las linternas y las velas se encienden en cada rincón de las calles y, sin duda alguna, a la gente le gusta pasear por esta ciudad. Tienes que dar un paseo para descubrir las diferentes torres: en la de los orfebres podrás tomar una escalera que te llevará hasta la parte baja de la ciudad.
El museo etnográfico al aire libre, el más grande de Rumania, está un poco fuera de la ciudad pero el desplazamiento vale la pena. Prevé medio día para la visita, es muy grande e interesante. Está instalado en un marco agradable y quiere ser interactivo para los pequeños y los mayores.
La ciudad de Sibiu es atractiva desde todos los puntos de vista, no podrás aburrirte. Nota: en 2007 Sibiu fue capital europea de la cultura.
