Niodor, continúa siendo una de esas escalas en el delta de Sine-Saloum donde nos gustaría que se detuviera el tiempo. Puestas de sol espectaculares con vistas al Atlántico, ostras de mangle a la parrilla sobre una fogata de madera, la contemplación del manglar, los pájaros, la fauna y la flora local...
El pueblo es bastante importante y tiene una vida social activa. Además, es posible alojarse en casas particulares o en el campamento. El paseo de Niodor hasta la punta de Sangomar al atardecer es especialmente bonito.
No dejes pasar la oportunidad de acompañar a las mujeres, que secan conchas y pescados, o a los hombres, que van de pesca (principales fuentes de ingresos del pueblo). En resumidas cuentas, en esta etapa de tu viaje por Senegal te esperan grandes recuerdos.
¡Resulta imposible hallarse en Niodior por casualidad! La isla, ocupada por el pueblo que porta el mismo nombre, está situada en el extremo oriental del delta del Saloum y solo puede accederse a ella a través del río o desde el océano. Tras una travesía en piragua que dura unos cuarenta minutos, durante la cual disfruté de vistas impresionantes sobre los manglares, pude pisar esta isla arenosa. Rodeada de una manada de niños, descubrí este entorno natural (hermosas playas de arena clara, palmeras, una dispersa vegetación) y el medio de vida de sus habitantes: cabañas tradicionales y casas "sólidas", la gran mezquita...
Lo que me gustó en especial de Niodior fue su ritmo apacible de vida y las actividades de sus habitantes, quienes pescan, recolectan ostras y almejas, cultivan un poco la tierra, no sin dificultad, y fabrican objetos artesanales hechos a base de materiales naturales locales. Si buscas cambiar de ambiente y hallar serenidad durante tu viaje por Senegal, recuerda pasar algo de tiempo en la isla de Niodior...