Fundada en el siglo XVII, la ciudad tuvo que desplazarse algunos cientos de metros por una bajada del nivel del mar que hubo tras su creación. En la actualidad, Lulea es la típica ciudad mediana (de unos 50.000 habitantes), con una importante universidad, diversos centros de investigación y un casco antiguo dinámico lleno de cafeterías y restaurantes.
Durante mi viaje por Suecia, pasé un día allí y, aunque Lulea me sorprendió agradablemente, con su pequeño centro peatonal y su catedral neogótica, tampoco recomendaría necesariamente pasar por la capital regional de Norbotnia, ya que la ciudad no tiene demasiados lugares de interés turístico. Sin embargo, Lulea puede ser un buen campamento base si vas a esta parte de Suecia a explorar las maravillas naturales de la región.
Luleå es un punto de partida interesante si quieres descubrir el norte de Suecia. Tiene una universidad,una cultura y una industria especialmente desarrolladas.
Aunque resulta interesante, el centro de la ciudad no es el lugar más llamativo de Luleå. Los que más llama la atención de esta ciudad son sus alrededores. En primer lugar, la ciudad iglesia de Gammelstad: por su singularidad y su relevancia histórica. También los archipiélagos de la región: por su belleza y su tranquilidad.
Recuerdo especialmente algunos momentos que pasé a orillas del mar. Al final de un día de verano, cuando el sol tarda más en ponerse, pude disfrutar de increíbles paisajes sobre las pequeñas islas vecinas. Y, a veces, cuando la suerte me acompañaba, podía ver Finlandia a lo lejos. ¡Es realmente curioso!