El recorrido que realizamos fue el siguiente: llegada a Tashkent, tren hasta Samarcanda, de allí otro tren hacia Bujará, después un trayecto en coche hasta Nukus, una excursión desde Nukus hasta el mar de Aral con noche en una yurta. Posteriormente regresamos a Nukus y al día siguiente nos dirigimos a Jiva.
En general, el viaje fue bien, aunque hay aspectos de la planificación con los que no estuvimos del todo de acuerdo o que creemos que se podrían mejorar.
Respecto a los guías, en Tashkent, Samarcanda y Bujará fueron excelentes: hablaban un español muy fluido, se expresaban con claridad e incluso nos recomendaron restaurantes en otras ciudades. Con Eldor, nuestro guía en Tashkent, y con la guía de Samarcanda estuvimos especialmente a gusto; fueron muy atentos y cercanos, lo que hizo que disfrutáramos mucho más de la experiencia. En cambio, la guía de Jiva era una estudiante de Turismo muy joven; su nivel de español era bastante limitado, lo que dificultaba la comunicación en algunos momentos, ya que su vocabulario resultaba muy escaso.
En cuanto a los hoteles, comprobamos por internet que en general los precios son bajos, pero considerando el coste total del viaje, los alojamientos en Tashkent y Samarcanda no estuvieron a la altura. Uno de ellos estaba muy alejado del centro y el otro era un hotel bastante antiguo, cuyo desayuno ofrecía muy poca variedad y ni siquiera incluía café.
Normalmente, con Evaneos hemos tenido la experiencia de que el organizador nos proporciona un itinerario detallado y lo va actualizando en caso de cambios. En esta ocasión, sin embargo, se modificaron horarios de trenes y hoteles sin que quedara reflejado claramente en el plan. En un caso, por ejemplo, el tren había cambiado de hora y nosotras no lo sabíamos; en otro día no estaba indicada la hora de recogida por la mañana. Creemos que este aspecto es muy mejorable, ya que en otros viajes con Evaneos la comunicación siempre fue más precisa.
Aunque es cierto que el organizador se puso en contacto conmigo por WhatsApp para informarme sobre el cambio de hoteles y darme los nuevos nombres, no actualizó esa información en el itinerario. A través de ese mismo canal pude hacerle algunas preguntas, pero creemos que hubiera sido mejor que todos los cambios quedaran reflejados en el plan de viaje actualizado.
Además, hemos echado en falta recomendaciones de restaurantes o consejos prácticos sobre el país por parte del organizador, algo que en experiencias anteriores con Evaneos sí habíamos recibido y valorado mucho.