Para un primer circuito de trekking en Uzbekistán, te recomendamos concentrarte en los imprescindibles del país. Tras llegar a Taskent, la capital, dirígete al parque natural Ugam-Tchatkal para descubrir las gargantas de Gulkam. Siguiendo el río Tchatkal, llegarás a la cascada de Aksarsay, maravilla de la naturaleza uzbeka. Cerca de allí, el monte Kumbel, a 2.250 metros de altitud, también te promete paisajes magníficos.
Cerca de la ciudad de Ourgeunetch, podrás descubrir las ruinas de las fortalezas de Toprak Kala y Ayaz Kala en el borde del desierto de Kyzyl-Koum. Luego, dirígete a la ciudad de Khiva, un verdadero museo al aire libre con varios monumentos declarados patrimonio de la humanidad por la Unesco. Antes de concluir tu viaje, no te pierdas visitar Bujará y Samarcanda, otros dos espléndidos oasis de la Ruta de la Seda.
En cuanto a los tipos de trekking, existen varias posibilidades. Las principales son:
- Senderismo cultural: combina la exploración de monumentos históricos y ciudades antiguas con caminatas por paisajes naturales.
- Trekking en el desierto: atraviesa las vastas extensiones de arena del desierto de Kyzyl-Koum.
- Trekking en la montaña: con o sin guía, recorre las cumbres y valles de las montañas de Pamir-Alay y Tien Shan.
Cada tipo de trekking ofrece una experiencia única y permite descubrir diferentes aspectos de la cultura y la naturaleza de Uzbekistán. ¡Contacta ya a tu agencia local para elegir la ruta que mejor se adapte a ti!