Estuve en La Gomera casi por casualidad. Hice una excursión de un día desde Tenerife. Fue durante mi primera estancia en Canarias y me arrepentí de no quedarme más tiempo. Esta isla conserva un bosque increíble: la laurisilva, un bosque primario. Yo me esperaba una selva amazónica y no es el caso. Es un bosque de laurel (no confundir con adelfas) formado por arbustos sarmentosos y tan espesos que casi no dejan pasar la luz. El día que estuve allí había niebla y el bosque tenía un aire muy misterioso, por no decir que inquietante.
Me impactó bastante el silbo gomero. Es un lenguaje silbado propio de sus habitantes. En una época en la que no había móviles, la gente lo usaba para comunicarse a través de los barrancos y se entendían perfectamente. Hoy en día se ha convertido en folklore, pero sigue siendo una experiencia divertida.
La Gomera es una isla que posee una particularidad muy especial que la diferencia del resto de las islas Canarias, y es que algunos de sus habitantes se comunican con el Silbo Gomero, casi igual que los pájaros. Si se diera el caso de que vayáis a La Gomera, y paseando por allí oís silbidos muy pronunciados, no os molestéis en buscar pájaros de gran envergadura, pues lo más seguro es que sencillamente sean habitantes gomeros "hablando" entre ellos con el Silbo. Originalmente creado como el medio que usaban los habitantes para comunicarse a través de las escarpadas montañas de la isla, aún hoy día hay personas que lo utilizan siempre para comunicarse. Aunque parezca mentira, la telefonía móvil no ha conseguido derrotar ni sustituir al silbido.
Además de esta particularidad cultural, La Gomera tiene extraordinarios paisajes entre los cuales se incluye el Parque Nacional de Garajonay, la verdadera joya de la isla, catalogado por la UNESCO como Patrimonio Mundial de la Humaniad. Os recomiendo especialmente también que visitéis la zona de Los Órganos, un acantilado que guarda un asombroso parecido con los tubos de un órgano de una iglesia. Un hermosísimo destino para vuestro viaje a Canarias.
¡Me encantó la Gomera! Sin duda alguna es mi favorita de las Islas Canarias. Una pequeña perla escondidas, todavía salvaje y preservada, donde, por momentos, tendrás la impresión de estar solo en el mundo en una magnífica y verde naturaleza.
Durante mi viaje a las Islas Canarias, me quedé varias semanas en La Gomera a pesar de haber previsto permanecer sólo algunos días. Me gustó mucho el ambiente despreocupado y tranquilo de la ciudad, lejos del turismo de masas y de los balnearios de sus vecinas.
También encontrarás muchas playas, ¡pero la riqueza de sus paisajes y de su exuberante naturaleza será suficiente para colmar tus expectativas! No pierdas la oportunidad e pasear por el parque nacional de La Gomera, y admirar la variedad de la flora local.