Gamala es un sitio arqueológico formado por los vestigios de una ciudad que llegó a albergar unas 3000 personas en la época romana. La visita al sitio merece especialmente la pena por su antigua sinagoga, su mikve público (baño ritual acorde a la tradición judía) y la muralla que protegía a la ciudad durante los ataques romanos.
El sitio arqueológico se encuentra en una reserva natural. Podremos aprovechar la visita para descubrir los paisajes de los Altos del Golán, observar las numerosas aves de presa que habitan el lugar (en particular los buitres leonados), contemplar una de las cascadas más altas de la región y visitar los aproximadamente 700 menhires de más de 4000 años de antigüedad que se encuentran en el sitio.
Durante un viaje a Israel Gamala no es una visita imprescindible. Sin embargo, si se visita el norte del país, acudir a este sitio arqueológico puede suponer una excursión muy agradable.