En el corazón de la magnífica región de Transilvania, Biertan es un ejemplo vivo de la influencia alemana en esta parte de Europa. Sin embargo, antes de descubrir Biertan, tendrás que seguir durante algunos kilómetros una minúscula carretera asfaltada que serpentea en un paisaje perfectamente rural de pequeñas colinas verdes. El pueblo en si me fascinó con sus pequeñas casa medievales y sobre todo su fortaleza, una de las mejor conservadas del país, inscrita en la lista del patrimonio mundial de la UNESCO.
Un paseo a través del pueblo cuenta la historia de las poblaciones alemanas, los caballeros teutónicos, enviados a estas regiones desérticas para proteger y cultivar estos grandes espacios y que construyeron numerosas fortalezas medievales para protegerse. Magnífica y profundamente natural; en mi opinión, Biertan merece formar parte de un itinerario durante un viaje a Rumanía.