La villa romana de Casalees una vuelta a la vida diaria de la gente rica romana.
La reconstrucción de las partes superiores del edificio permite pasear por un camino trazado por las murallas que dividen cada habitación de la villa y permiten admirar cada mosaico: escenas de caza, escenas eróticas, gimnastas, juegos del circo, animales, vegetación, etc.
En el exterior sigue existiendo un sistema de acueductos para las termas, con sus hipocaustos que permitían calentar el caldarium. Nos imaginamos fácilmente la vida cotidiana de los habitantes de esta residencia imperial, hasta los detalles íntimos del lavado corporal. Las letrinas te sorprenderán.
Los paneles, por desgracia, no están traducidos al español, sin embargo permiten entender la función de cada habitación explicando los temas de cada mosaico.
Fue durante nuestro viaje por Sicilia cuando descubrimos la Villa Romana del Casale. Se trata de una lujosa villa romana que refleja la estructura económica y social de la época. Data del fin del siglo IV y era propiedad de una rica familia romana.
Nos introducimos por la entrada monumental que conduce a un patio en forma de herradura rodeado de arcadas. A continuación visitamos las termas, compuestas de varias salas, y que estaban bien suministradas por un acueducto. Después, una escalera nos llevó hasta un segundo piso donde, desde lo alto, pudimos admirar los hermosos frescos que representaban escenas mitológicas, los trabajos de Hércules, niños pescadores, la fauna, la flora y escenas de la vida doméstica.
Una de las más originales es sin duda, la de las atletas en bikini. Así es, en aquella época ya existía el bañador de dos piezas.
A lo largo de la galería recorrimos las diferentes habitaciones que componen la villa para terminar en una enorme sala. En el suelo había una gran escena representando la caza de animales salvajes en África, y en el fondo, la Basílica.
Tras más de dos horas en el interior, finalizamos la visita en el edificio que alberga los baños de la época, y salimos encantados de la visita.