Hay motivos fundados para el desconcierto: al llegar aaNovo Mesto (la "ciudad nueva") te encuentras de pronto en una urbe medieval de gran encanto, en un entorno mágico, al borde del río Krka. Es capital de la región del sudeste de Baja Carniola, sin ninguna duda su destino con más encanto, y merece una visita en caso de que pases por allí durante tu viaje por Eslovenia.
Su centro se encuentra contenido sobre un meandro del río Krka y está compuesto por un pintoresco conjunto de pequeñas casas con techos de tejas rojas, sobre los cuales emergen a veces los campanarios de diversas iglesias. El paisaje de colinas y valles en torno a esta pequeña ciudad de 25 000 habitantes le añade cierto encanto, a pesar de que las inmediaciones de aspecto industrial puedan parecer a primera vista poco hospitalarias.