A menos de 100 kilómetros al suroeste de Ljubljana, la visita a las grutas calcáreas de Skocjan es muy fácil de organizar, es una excursión realmente impresionante. El lugar es enorme: se trata del humedal subterráneo más grande del mundo. Las galerías se extienden a lo largo de más de cinco kilómetros, con enormes cavidades naturales, techos que en ocasiones están a 300 metros del suelo, puentes naturales, un cañón subterráneo... El río Reka pasa por estas grutas, y en sus aguas habitan numerosas especies animales autóctonas. Tras las fuertes lluvias de primavera y otoño, su caudal puede bajar con mucha fuerza.
Una de las peculiaridades del lugar que más me impresionó fue la presencia de estalactitas y estalagmitas que pueden ser de muy diferentes tamaños y colores. La estalagmita más grande de la gruta tiene 15 metros de alto.