Montañosa, arcaica, aislada, encarnación del "Cáucaso salvaje", la región de Khevsureti fascina ahora y siempre a georgianos y extranjeros. Una vasta región de altas montañas, escasamente poblada, con sorprendentes vestigios de aldeas-fortaleza medievales.
Aconsejo:
¡Quédate bastante tiempo y pasea todo lo que puedas! Cada valle es diferente y merece una estancia. La región ocupa dos vertientes diferentes de la cadena montañosa y tres cuencas distintas. ¡Mucho que explorar!
Mi opinión
La región de Khevsureti es, quizás, la región de Georgia que todavía me fascina más. Existe el mito nacional del guerrero khevsur, que se conserva en el siglo XX tal y como era en la Edad Media; el folclore, la cultura pagana de la población, esos pueblos remotos que parecen no haberse movido durante siglos. Hay también valles de alta montaña, verdaderamente de difícil acceso, en los que el tiempo se ha detenido, con ninguna o muy pocas carreteras. Estas cumbres, glaciares, praderas alpinas, lugares donde la naturaleza da continuamente el tono y donde los hombres se adaptan humildemente.
La región de Khevsureti es notable por sus vestigios medievales alucinantes de aldeas con torres defensivas reagrupadas, típicas del norte del Cáucaso. Chatili es la mejor conservada de todas ellas, pero Gudani, Mutso, Ardoti o Bisso son igualmente sitios carismáticos, cargados con la espiritualidad de las alturas.
Nos acercaremos mejor a Khevsureti por la parte de Piraketa, vertiente sur y todavía habitada, centro de la cultura khevsur, antes que hacer una excursión en la zona despoblada de Pirikiti. Pero podemos también llegar a través de la pintoresca aldea de Djouta, desde Khevie, segundo lugar habitado más alto de esta parte del mundo...
