En el mes de abril, Grecia está inmersa en la celebración de la Pascua, una festividad tradicional llena de colores y sabores. Participa en la fiesta de primavera en Patmos, donde la llama sagrada es transportada directamente desde Jerusalén, o en Corfú, que rebosa de tradiciones coloridas. Asistir a la procesión del santo entierro al anochecer el viernes santo es una experiencia inolvidable.
El domingo de Pascua, las familias se reúnen para una gran comida tradicional. Aprovecha esta ocasión para probar el cordero asado, la ensalada griega, el tzatziki, los dolmades, el queso feta y los pasteles griegos.
Aparte de las celebraciones de Pascua, abril es un buen momento para descubrir la naturaleza griega. Explora los exuberantes bosques de Cefalonia, observa las aves migratorias en el lago Kerkini y en el delta de Evros, o disfruta de las playas de Grecia antes de la llegada de las multitudes veraniegas. Por último, no te pierdas la visita a sitios históricos imprescindibles, como el Partenón, la acrópolis de Atenas, el templo de Erecteión y el teatro de Dionisio. ¡Quizá incluso te encuentres con la Pitia en Delfos!