Como muchos pueblecitos malasios, Port Dickson no abunda en atracciones, folklore o puntos de interés. Se trata de una pequeña ciudad ferroviaria, situada cerca del mar. Sin embargo, no podrás bañarte aquí: las aguas agitadas del estrecho de Malaca, consecuencia directa de una nefasta política indonesia en materia de medio ambiente, te quita las ganas de meter un solo dedo.
Un malayo me invitó a conocer a su familia, de ahí que pasara por aquí. Fue prácticamente una casualidad. Me llevó a un restaurante donde se sirve el mejor satay del país, y lo cierto es que en este lugar los pinchos saben riquísimos. Antes de marcharme, paseé por calles sin ningún atractivo, en dirección al borde del mar; pude comprobar que Port Dickson no es un lugar imprescindible para veren medio de un viaje por Malasia.
Durante tuestancia por Malasia, Port Dickson no te resultará un destino prioritario, ya que el país abunda en playas de arena fina. Sin embargo, si te encuentras en Kuala Lumpur y quieres dirigirte a otro lugar que no sea esta ciudad llena de rascacielos, Port Dickson puede convertirse en un destino agradable.
Aquí podrás pasar un día o un fin de semana sin ningún problema. Muchos hoteles han abierto sus puertas en este pequeño centro turístico de verano. Las playas de aquí no son tan bonitas como en otros lugares, pero el clima es agradable.
Entre los lugares más interesantes se encuentra el faro, muy bonito y con una hermosa vista sobre la playa, pero también el Yacht Club, fundado en 1927 por algunos expatriados. Debido a ello, Port Dickson es una ciudad llena de barcos preciosos, además de ser una estación petrolífera importante.