Panajachel es el punto de llegada habitual de los turistas que visitan el lago Atitlán. Durante mi viaje a Guatemala descubrí que se trata de una pequeña y coqueta ciudad que está totalmente volcada al turismo.
En Panajachel encontré numerosos hoteles, posadas, restaurantes, bares y un bonito mercado de artesanía. Si viajas buscando retiro y tranquilidad te recomiendo Santa Catarina Palopó, San Antonio Palopó, San Pedro, Santa Cruz, San Marcos o San Juan. Personalmente, yo me alojé en Panajachel porque me pareció lo más práctico. Desde esta ciudad salen los autobuses a Chichicastenango y es donde hay una mayor oferta de lanchas para navegar por el lago.
En resumen, Panajachel es un lugar ideal para descubrir esta región en solo unos días y pasar una agradable estancia.
Panajachel es uno de los pueblos más grandes y animados del lago Atitlán. Sin embargo, a mí me gusta bastante más San Pedro. Se puede decir que Panajachel es una gran avenida turística que conduce a un lugar con vistas espléndidas del lago. Con la cantidad de embarcaciones que transportan a los turistas y a los habitantes locales de un pueblo a otro, puedes pasar 1 hora o 2 en Panajachel, más de eso es demasiado. Al menos esa es mi recomendación tras haber estado varias veces en el lago Atitlán.
Siempre se ha dicho que Panajachel es el lugar más hippy del lago. Puedes recibir masajes, hacer cursos de yoga, de meditación... Sin embargo, lo que yo he comprobado es que sus bares y restaurantes son particularmente caros. No creo que esta ciudad sea de visita obligada durante un viaje a Guatemala, pero una pequeña parada aunque sea para disfrutar de las excelentes vistas del lago puede merecer la pena. ¡Cuidado con las pequeñas embarcaciones, son muy inestables!