Con excepción de su iglesia del siglo XVII-XVIII, la ciudad de Zunil no tiene mucho interés. La visité por primera vez mientras bajaba de las Fuentes Georginas (lugar muy olvidado por la mayoría de viajeros en Guatemala que pasan por Xela, situadas sobre el volcán que da nombre al pueblo. Intrigado por la historia que leí en una guía de viajes muy completa pero menos conocida que las "Lonely" y "Routard", fui a conocer al Maximón, una especie de santo pagano, (también llamado San Simón) al que se le piden protección y favores. Fue uno de los momentos más surrealistas de mi vida. Más tarde, entrevistando a un antropólogo, me di cuenta de las cuestiones de poder y de cooptación que existen con la Cofradía de San Simón. Background histórico ignorado por los turistas, que simplemente pagan por asistir a estos rituales.
Viviendo en Xela, sólo voy a Zunil con mi familia o mi mujer, al mejor sitio de baños termales: Santa María, situado en la ruta, cerca del puente que cruza un río bastante sucio... cosa que nos da una idea de la conciencia de la población hacia las cuestiones ambientales.