Muy al norte de Noruega, por encima del círculo polar ártico, Harstad, con 25.000 habitantes, es el tercer municipio de la Noruega del norte. No me quedé más que un día, de paso hacia el sur de la isla Senja a la que me llevó un ferri. Ese día me permitió descubrir una pequeña ciudad típica noruega poco frecuentada por los turistas.
Todo el mundo encontrará algo de su gusto en Harstad, entre caminatas por las cimas próximas, ciclismo en los archipiélagos vecinos y visitas culturales, especialmente el centro histórico de Trondenes, la granja Røkenes y la goleta Anna Rodge. Hay incluso un parque acuático situado bajo unas grutas, el Grottebadet.
Al final, Harstad es perfecta para un viaje fuera de los destinos habituales combinado con la visita de los archipiélagos vecinos (Lofoten, Vesterålen, Senja).