Guía gourmet: 7 imprescindibles de la comida brasileña
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¿Tienes hambre? Entonces perfecto, porque la comida brasileña está hecha con mucho amor y consigue que hasta los estómagos más insaciables se sientan satisfechos. ¡A comer!
La feijoada
Como no podía ser de otra manera, arrancamos con el plato nacional por excelencia: la feijoada, estrella indiscutible de una comida familiar y también de un buen brunch de domingo. El ingrediente esencial de la feijoada, como su nombre indica, es el feijão (judías negras o frijoles). Pero esta especie de fabada brasileña –respetando las diferencias– tiene también otros ingredientes: col picada, farofa crujiente (harina de yuca o mandioca frita), rodajas de naranja, arroz y carne de cerdo; aunque la “feijoada vegetariana” está empezando a aparecer en el menú de algunos restaurantes en Río.
Sin embargo, el principal ingrediente de la feijoada es el tiempo. Hay que remojar los frijoles el día anterior y cocinarlos a fuego lento el mismo día, en un delicado baño de laurel, cebollino, perejil, ajo y cebolla, así que este no es realmente el tipo de plato que se improvisa en el último minuto...
Del norte al sur de Brasil, la feijoada reaparece en innumerables variantes locales y seguramente os la cruzaréis en un momento u otro de vuestra estancia. Un buen consejo: evitad cualquier esfuerzo físico excesivo justo después de comer.
El bobó de camarão
Si la feijoada es el buque insignia de la cocina brasileña en general, el bobó de camarão es el de la cocina bahiana con influencias particularmente claras de África Occidental.
El primer placer que aporta este plato es su bonita pronunciación al decirlo en portugués. El segundo es contemplarlo, con su hermoso color naranja, producto de la combinación del rojo (tomate, pimiento), leche de coco, yuca y camarones, a los que se añaden un sinfín de interesantes condimentos (cilantro, limón, pimientos…).
No lo llaméis “sopa”, o los brasileños lo considerarán un pecado. Es un plato en sí mismo, que tiene como compañero ideal el arroz blanco.
La Coxinha
Hemos elegido la coxinha para hablaros del placer cotidiano de los salgados, unos pequeños aperitivos que se encuentran por todas partes en los lanchonetes (restaurantes informales) o botecos (bares) de Brasil. Pero también podríamos haber hablado de empadas (mini empanadas), pastéis (pasteles) o acajaré (buñuelos de frijoles), otras apuestas seguras de la comida rápida auriverde.
Solo os falta un reto, que corre de vuestra parte: encontrar a quien tenga el mejor proveedor, porque la calidad de los salgados varía enormemente de un sitio a otro. ¿Preparados para la yincana?
La moqueca de peixe
Nos quedamos un poco más en Bahía para conocer la otra estrella culinaria del lugar: la moqueca de peixe.
Una capa de tomate, otra de cebolla, otra de filete de pescado blanco; todo cubierto con leche de coco y lo dejamos hervir a fuego lento antes de añadir las hierbas y añadir el toque final: una cucharada de aceite de dendê, aceite de palma roja, un ingrediente indispensable en la cocina bahiana. Y si no sois mucho de pescado no hay problema, la moqueca también está disponible en camarones, pollo, huevo, etc.
El pão de queijo
¿Cómo y por qué este pequeño “pan de queso” de Minas Gerais no está todavía como aperitivo en las mesas de todo el mundo?
Es un verdadero misterio, porque una vez hayáis probado este snack crujiente con forma de buñuelo, hecho de harina de yuca, huevo y queso de vaca, no podréis evitar obsesionaros con el siguiente bocado ¡Totalmente irresistible!
El Açaí na tigela
Tiene el color del chocolate y sabe (un poco) a chocolate, pero no es chocolate. Y, además, es mucho más saludable. El açaí es una baya fruto de una palmera que crece en el hyperlinkAmazonas/hyperlink.
Desde allí, el açaí se ha extendido al resto del país y no hay ni un quiosco costero que no lo ofrezca en zumo o batido. Con un poco de muesli, unas rodajas de plátano y una cucharada de miel, se obtiene el açaí na tigela (que significa literalmente “açaí en un cuenco”), un pequeño aperitivo que nutre, refresca y, además, está repleto de antioxidantes.
Pero el açaí no es la única fruta que descubriréis en Brasil. Maracuyá, acerola, cupuaçu o cajà, ¡es el paraíso de las frutas!
La caipirinha
Era imposible reseñar los sabores brasileños sin mencionar la imprescindible caipirinha. Cachaça, azúcar de caña, lima y hielo picado: eso es lo básico, pero en los bares y clubes de Río, São Paulo, Salvador o Recife, el cóctel estrella de Brasil tiene casi infinitas variaciones.
Fresa, piña, mango o maracuyá: las caïpifrutas son especialmente populares. Pero si pensáis probarlas todas en una noche, recordad: las noches de fiesta siempre tienen un mañana...
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