Hay que tener curiosidad y humildad para apreciar totalmente Veliki Tabor. En efecto, si lo comparas con otros monumentos y castillos de Europa, como, por ejemplo, Versalles, Veliki Tabor es solo un edificio grande sin demasiado interés. Sin embargo, en el norte de Croacia, el lugar es un orgullo local.
Pasé por Veliki Tabor hace unos años, pero en aquella época estaba cerrado al público por obras de renovación. Luego me enteré de que ha vuelto a abrir sus puertas. En todo caso, desde fuera tenía buena pinta, con sus torres redondeadas, sus muros replegados sobre sí mismos, y su color blanco inmaculado, rematado con tejas rojas. Los alrededores del castillo también tienen mucho encanto: un paisaje campestre verde y tranquilo. Visítalo durante tu viaje por Croacia.
Quedé muy impresionado por este lugar y su imponente castillo, que se puede ver desde muy lejos conforme te acercas por la carretera. Con sus formas curvas y su gran tamaño es un buen ejemplo de arquitectura defensiva medieval y está particularmente bien conservado y rehabilitado. Sin embargo, a mí me pareció que el interior del castillo no era tan impresionante, además la ausencia de mobiliario le restaba encanto.
Por otro lado, el castillo de Veliki Tabor alberga varios museos en su interior, como una bonita colección de coches antiguos, una exposición de las primeras recetas farmacéuticas o incluso una exposición de espadas y armaduras. En resumen, yo no aconsejaría recorrer grandes distancias para visitar Veliki Tabor, pero si el castillo está incluido en tu ruta por Croacia podrías dedicarle al menos medio día.