La pequeña localidad de Fira se encuentra en la idílica isla de Santorin; de forma alargada, tiene sus calles dispuestas de forma paralela a los acantilados. Una de las mejores cosas que puedo recordar, es que para llegar hasta su puerto hay dos opciones: ir caminando y bajar los 588 escalones que hay, o bien bajar en teleférico (que es lo que yo hice).
Para la logística y la organización de vuestra visita a Santorini, en Fira se encuentra la principal estación de autobuses de la isla; desde allí podréis ir a donde queráis. Y si no tenéis pensado alquilar ningún coche, entonces vuestra mejor opción será alojaros allí en Fira.
Finalmente, me gustaría añadir que Fira fue el lugar de Santorin donde pude compartir más momentos agradables con los locales. Y si bien Oia es más bonita, creo que Fira es más auténtica.