Cleggan es un puerto conocido por la trágica historia de sus 25 pescadores que se perdieron en medio de una tormenta. El pueblo es muy tranquilo, pero en él podrás hallar media docena de bares donde reponer fuerzas si no puedes esperar al retorno de los pescadores para degustar pescado y marisco muy frescos, llevados casi a diario a tierra firme.
En la actualidad, Cleggan debe su crecimiento económico en parte gracias al turismo que se desarrolla en la zona. Aquí podrás hacer muchas cosas si te gusta la naturaleza. Tuve la oportunidad de visitar las islas vecinas y hacer algunas viajes en barco. También existe la posibilidad de montar a caballo por la playa.
Los suntuosos paisajes de los alrededores están colmados de vestigios arqueológicos que me ayudaron a sumirme en el ambiente místico de Connemara.