Ciudad de unos 250 000 habitantes Czestochowa se impregna de un fervor religioso sin igual en Polonia por el magnífico monasterio de Jasna Góra, que alberga la fabulosa reliquia de la Virgen Negra. El monasterio, que data del siglo XIII, es sin duda uno de los edificios religiosos más bonitos del país y merece la pena visitarlo.
Cuando tienen lugar las procesiones, que reúnen a millones de visitantes cada año, algunos de los cuales caminan decenas de kilómetros, la ciudad se pone hasta arriba de gente y visitarla puede ser complicado, a no ser que tengas un interés sociológico en observar a la muchedumbre.
En resumen, a no ser que te interese especialmente la religión católica, Czestochowa no es necesariamente imprescindible en un viaje a Polonia, y, además, su centro es bastante soso.
Yo solo pasé allí un fin de semana en febrero, pero me dio tiempo a ver muchos sitios distintos. Czestochowa, situada al sur de Polonia, es un tesoro cultural religioso. Allí se encuentra el monasterio de Jasna Gora, que alberga el retrato de la Virgen Negra. El papa Juan Pablo II iba allí regularmente a hacer procesiones. Muchos peregrinos la visitan en el mes de agosto, cada año.
La ciudad en sí es interesante. Su arquitectura cuadrada y colorida es típica de Europa del Este y también se pueden encontrar pequeños restaurantes para probar los pierogi con una buena cerveza polaca.
La ventaja: para una visita cultural y religiosa, un viaje tranquilo.
El inconveniente: es difícil encontrar habitantes que hablen inglés. ¡No te olvides tu diccionario de polaco de bolsillo!