Le lac de Çomce (Turquía)

Decir que los montes Tauro son espectaculares se queda corto. Por eso, encaramado a 2 600 metros de altitud, el lago Comce me provocó una sobredosis de belleza. Para empezar, es la recompensa ansiada después de cinco horas de caminata. El decorado es durísimo, pero también fantástico, alejado de la civilización, en medio de una paz absoluta.

La serenidad y la belleza son el lujo de los senderistas y el lago Comce es el punto ideal para acampar una noche. Si sus aguas cristalinas están solo al alcance de los más temerarios o masoquistas, su frescor alivia los sudores de la altitud. Pocas veces he visto un paisaje más bonito cuando he estado de viaje por Turquía. No hay árboles y me da la sensación de que la luna esté guardando sus lagos.