Para llegar al glaciar Águila, lo primero que hay que hacer es contratar un crucero en la Patagonia argentina y chilena con salida en Punta Arenas, Chile, o en Ushuaia, Argentina, en función del país en el que te encuentres.
La visita al glaciar Águila, el cuarto día de nuestro crucero, significó el final de nuestra travesía por el canal Beagle y el descubrimiento de las islas de Tierra del Fuego. A bordo de nuestra zódiac, nos dirigimos al fiordo Agostini a pesar del agitado oleaje y el viento glacial que soplaba sobre nosotros. Nuestro guía nos llevó a dar un paseo de alrededor de una hora por la costa. Tras algo más de una hora de caminata, llegamos al borde del glaciar Águila, ¡pudimos incluso tocarlo! Nos sentíamos muy pequeños ante la inmensidad de este bloque de hielo. Tras hacer algunas fotos, lamentablemente tuvimos que regresar a la zódiac, ya que la marea estaba subiendo y comenzaba a anochecer.
Guardo un gran recuerdo de este paseo explorando uno de los glaciares más bonitos del fiordo Agostini. ¡Si te sueles marear en barco, ten cuidado, las zódiacs se balancean mucho!