Al llegar a Dublín, explora la ciudad entre calles empedradas, músicos callejeros, monumentos, parques y pubs tradicionales. En el oeste, la región de Connemara. Disfruta de las muchas actividades al aire libre, entre espectaculares paisajes salvajes: fiordo de Killary, abadía de Kylemore, islas de Aran... ¡un auténtico paraíso!
Subiendo por la costa hacia el norte, atravesamos el condado de Mayo antes de llegar a Sligo. Descubre los dólmenes, cairns y otras construcciones druídicas de la región antes de una iniciación al surf. Más adelante, el condado de Donegal, con sus altos acantilados y sus castillos.
Otra opción es visitar Irlanda del Norte desde Belfast. Entre los imprescindibles se encuentran Carrick-a-rede Island y el Giant's Causeway (la Calzada del Gigante), patrimonio mundial de la Unesco. Y desde Cork nos dirigimos hacia la famosa Ring of Kerry, una ruta panorámica a lo largo de la costa sur. Nos dejamos seducir por Killarney, sus bosques, sus lagos y por la encantadora península de Dingle.