Viajes a Calabria

Un circuito de una semana en Calabria es ideal para descubrir esta región aún poco conocida. Ya sea en un roadtrip o en vacaciones familiares, una estancia en Calabria atrae a los amantes del tiempo pausado. Un itinerario a medida en Calabria es una invitación a reducir el ritmo y disfrutar de las hermosas playas de Capo Vaticano.
Con una estancia de 15 días en Calabria te puedes tomar el tiempo necesario para viajar de otra manera, visitando lugares poco concurridos como el centro histórico de Gerace. También te das unos días para hacer senderismo en la región, por los senderos del parque nacional del Aspromonte. Unos días adicionales son también la oportunidad perfecta para imaginar un circuito personalizado combinado entre Puglia y Calabria.

Muchos viajes a Calabria comienzan en Lamezia Terme. Desde allí, visitas el casco antiguo de Tropea, idealmente durante un viaje en las temporadas intermedias. Para refrescarte, dirígete a las playas tranquilas de Capo Vaticano en lugar de las de Tropea. Luego descubres Pizzo y su castillo, siempre con su famoso postre helado en mano.
Después de un paseo por el pueblo medieval de Gerace, recorres el parque nacional del Aspromonte, que encanta a todo tipo de excursionistas. El itinerario continúa hacia las casas sobre pilotes de Scilla, con una sesión de snorkel en Chianalea. Luego pon dirección a Reggio de Calabria, el sitio arqueológico de Locri Epizephiri, las playas de Roccella Ionica y finalmente el parque nacional de la meseta de Sila.

Si bien Tropea y Scilla son las ciudades más populares de Calabria, Gerace está clasificada entre las ciudades artísticas de Italia. Menos concurrida que sus compañeras, es un espléndido pueblo encaramado en la costa jónica. Imprescindible durante un circuito a medida en Calabria, Gerace ofrece un viaje en el tiempo con sus piedras de época y su castillo normando del siglo XII.
En todas partes, los tesoros de la arquitectura medieval, del Barroco y del Renacimiento se dan la réplica. Los epicúreos no dejarán de probar el buen vino blanco local en una de las mesas de la ciudad, así como el rafioli, el postre local. También este es el punto de partida ideal para explorar el parque nacional del Aspromonte.

Unas vacaciones en familia en Calabria son la promesa de descanso al sol, visitas culturales y caminatas accesibles para todos. Para los amantes del baño y los castillos de arena, las playas de Capo Vaticano o de Baia di Riaci con sus aguas cristalinas serán sitios excelentes para la diversión y el juego.
Para los pequeños amantes de la historia, poned dirección al castillo de Crotone, el sitio arqueológico de Capo Colonna o los famosos bronces de Riace en Reggio de Calabria. Para disfrutar de una vista panorámica, sube a la cima del monte Consolino o pasea por el Lungomare Falcomatà. Para caminatas a pie o en bicicleta en familia en Calabria, dirígete al parque nacional de la Sila o del Aspromonte.

Una naturaleza hermosa y bien preservada, una gastronomía que saca el mejor partido de los alimentos locales, pueblos congelados en el tiempo: Calabria y Puglia se descubren con un fondo de dolce vita. Pero para ofrecerte un viaje fuera de lo común, Calabria es el destino ideal. Harás escala en pueblos más tranquilos y playas menos concurridas que en Puglia.
Si bien Puglia alberga pueblos magníficos, Calabria atrae más a los amantes de la historia con sus pueblos medievales. Los amantes de las montañas, bosques y cascadas elegirán más bien una estancia organizada en Calabria. También se viene a estas regiones por su cocina mediterránea refinada, un poco más picante en Calabria (¡no olvides probar la 'Nduja!).

Calabria es una región aún fuera de los radares turísticos. Así que, para preservar esta joya desconocida, nos esforzamos por viajar de manera más responsable. Para evitar el sobreturismo, se recomienda viajar fuera de las temporadas turísticas, haciendo un circuito en mayo, junio o septiembre.
Elegir una estancia sostenible en Calabria también significa descubrir lugares menos concurridos como el parque nacional del Aspromonte, la antigua ciudad de Gerace o las playas de Capo Vaticano. Viajar de otra manera también es apoyar a las comunidades locales y respetar el medio ambiente. Favorecer los pequeños comercios, apoyar las iniciativas locales, no dejar basura en senderos o playa... Son gestos a adoptar para valorar el ecoturismo en Calabria.

La forma más rápida de llegar a Calabria es mediante vuelos directos desde Madrid o Barcelona hasta el aeropuerto de Lamezia Terme. La duración aproximada de estos vuelos es de dos horas y media. Aunque más allá de los vuelos hay otras experiencias más responsables con el medioambiente.
Para los viajeros que buscan una experiencia diferente, existe la opción de combinar tren y autobús. El trayecto en tren desde Barcelona hasta Reggio Calabria requiere transbordos en ciudades como Lyon y Turín, con una duración total de 22 horas.
La ruta por carretera ofrece la libertad de explorar Italia a tu propio ritmo. La distancia desde la frontera española hasta Calabria supera los 2.500 kilómetros, atravesando paisajes espectaculares de la costa mediterránea.