Todas las ciudades de Perú, incluso los pueblos, tienen su propia Plaza de Armas. En la plaza de Yanque, tuve la oportunidad de ver a una mujer vestida con el traje típico de la región y que llevaba un halcón enorme en el hombro. De hecho, anima a los turistas a que se saquen fotos con el animal. Y yo me dejé llevar por el juego, ¡vaya sensación! Me gustó mucho, la verdad. Y si los halcones no son lo tuyo, también hay otras personas que llevan llamas o alpacas.
No me quedé mucho tiempo en el pueblo, pero si hubiera podido, estoy segurísima de que me habría pasado por los baños termales « Las Termas de Tambo ».
Yanque también cuenta con una iglesia muy bonita que se puede ver desde la plaza mayor. Su color se debe al material que se utilizó para llevar a cabo su construcción, una roca volcánica de tono blanco.