Chilca es una estación balnearia que se encuentra a dos horas por carretera desde Lima. Popular entre los surfistas, Chilca es un lugar relativamente tranquilo que goza de un clima suave durante todo el año.
Fui a Chilca un poco por casualidad. Gustavo, un amigo peruano aficionado al surf, participaba en una competición organizada por la ciudad. Me propuso que le acompañara. Acepté su invitación y allá que nos fuimos, cinco personas embutidas en un coche hasta la pequeña ciudad costera. Las canciones peruanas nos animaban el viaje.
Llegamos de noche. Tuvimos que esperar al día siguiente para ver este pueblo de pescadores. Como en la mayoría de las ciudades peruanas, los principales monumentos de Chilca se encontraban en la Plaza de Armas, entre ellos un mercado bastante curioso.
Conservo un buen recuerdo de mi fin de semana en Chilca, entre baños, clases de surf y deliciosos platos de pescado. No dudes en probar el ceviche (pescado crudo marinado) y la parihuela (sopa de pescado).