Valle del Parque Nacional Nahuel Huapi en Patagonia, que conduce a los pies de la célebre aguja Frey, auténtico El Dorado para los escaladores.
Aconsejo:
No hay problema para aquellos que viajen con un presupuesto más ajustado: es posible acampar alrededor del refugio Frey y disfrutar plenamente del lugar.
Mi opinión
El camino que conduce al hermoso valle Frey es sorprendente. Consiste en un viaje en teleférico y posteriormente en un telesilla que lleva al Cerro Catedral. Como habrás podido adivinar, nos encontramos en una estación de esquí: de hecho, es la más grande de América del Sur. Desde aquí puede llegarse al filo del cerro. Las vistas son magníficas: numerosas montañas y volcanes con sus cimas nevadas, especialmente el Lanín, que marca la frontera con Chile. Para alcanzar el famoso valle es necesario emprender una marcha de dos horas por un terreno algo difícil.
Estuve aquí en verano con la intención de hacer senderismo y divertirme, pero me dijeron que algunos aficionados al esquí "extremo" venían aquí en invierno. Si el terreno ya es resbaladizo sin nieve, no puedo ni imaginarme cómo estos deportistas se las apañan para mantener el equilibrio con toda la equipación que llevan encima.
El paisaje del valle Frey parecerá idílico a cualquier aficionado a la escalada: vegetación baja, pequeños lagos y, sobre todo, multitud de aguijas de granito rojo muy compacto que parecen haber sido perfectamente fracturadas para ayudar a alcanzar su cima. En cuanto a los que no les gustan tanto las cuestas, también les interesará visitar el lugar si pasan por Bariloche durante su viaje a Argentina. El animado ambiente del refugio y, sobre todo, las enormes pizzas que se sirven en él son merecedoras del esfuerzo requerido para alcanzarlo. Ah, y también el paisaje...
