El ascenso al Tupungato no interesa mucho a la gente, y esto se debe en buena parte al atractivo de su mayor vecino: el Aconcagua. Mi excursión hacia el Tupungato resulta ser una aventura fantástica, y podemos considerar con justicia al lugar como uno de los secretos mejor guardados de los Andes.
Equipos experimentados te ofrecen llevarte hasta el Tupungato desde Mendoza o Tupungato, siendo esta la mejor solución, ya que llegar hasta allí es bastante tedioso. De todas formas vas a necesitar viajar en un jeep ya que algunos ríos son totalmente intransitables a pie.
Para quienes no quieran subir a la cumbre, la mejor opción es subir al Tupungatito, el hermano pequeño del volcán extinto en el que se produce hoy día actividad magmática. Podrás contemplar el lago de ácido que llena el cráter y observar la actividad volcánica a cámara lenta (no hay erupciones desde 1986).