Una excursión al Parque Nacional Corcovado en Costa Rica es una experiencia inolvidable. Si te gusta ver animales salvajes en su hábitat natural, y, además, en un auténtico oasis de verdor, este lugar está hecho para ti.
Precisiones sobre el Parque Nacional Corcovado
El Parque Nacional Corcovado se encuentra al sudoeste de Costa Rica, en la península de Osa. Esta zona se declaró Parque Nacional en 1975, lo cual ayudó considerablemente a frenar la deforestación manifiesta desde la llegada de los leñadores en los años 60. En gran parte debido a esto, solamente en el Parque Corcovado hoy en día podemos observar un tercio de todas las especies de árboles de Costa Rica, es decir, unas 700 especies. Tiene una extensión de casi 450 km² y alberga, entre otras, unas 10.000 especies de insectos, 2400 especies de plantas o incluso 360 especies de aves. Es un observatorio de biodiversidad estupendo, bordeado por las aguas del océano Pacífico.
Algunos datos prácticos
Para llegar al parque, primero tendrás que ir hasta el puerto de Sierpe, tomar un barco para atravesar el impresionante manglar y, después, navegar algunos kilómetros sobre las aguas, a veces turbulentas, del océano Pacífico. La travesía ya es una aventura magnífica e inolvidable de por sí. Te aconsejo que pases al menos una noche en la península de Osa, ya sea en un alojamiento apartado de alta gama, en una cabaña en la ciudad de Bahía Drake, o, si te gusta la aventura y no tienes miedo de las numerosas hormigas, en la estación de guardabosques del Parque Nacional. Hay posibilidades para todos los bolsillos, pero que sepas que Costa Rica no es un país barato. Con un día puede bastarte para recorrer el parque, pero si te gusta el senderismo, podrás aprovecharlo al máximo siguiendo sus diferentes rutas durante dos o tres días. Tres rutas parten desde la estación de guardabosques La Sirena y tienen una longitud de 16 a 23 kilómetros.
Recorrido del parque
Ahora vamos a embarcarnos a recorrer un parque aún salvaje y lleno de animales de todo tipo. Levántate muy temprano por la mañana para poder observar a la fauna aún dormida, pero desayuna bien para aguantar el tirón. Después, tras una hora en un pequeño barco a motor por las aguas del Pacífico, atrévete a hacer una ruta de senderismo. Si tienes cuidado de no hacer ruido, seguro que podrás ver perezosos, los cuatro tipos de monos de Costa Rica (araguatos, capuchinos, ardilla y araña), tapires de Baird, osos hormigueros, y, por qué no, aletas de tiburón, tucanes, periquitos… Te aconsejo hacer la visita al Parque Nacional Corcovado con un guía que, con sus prismáticos especiales, te mostrará todo tipo de insectos, animales y también curiosidades vegetales. ¡Es increíble observar tal cantidad de animales en su hábitat natural en tan poco tiempo! Todo ello en una selva densa y exuberante al borde del océano Pacífico... Como habrás comprendido, este parque, es, sencillamente, de visita obligada, así que deberás incluirlo en tu itinerario por Costa Rica.
No en vano la revista National Geographic ha descrito Corcovado como «el lugar mas intenso del planeta, biológicamente hablando». ¡Disfruta recorriéndolo!
