Lo mejor de San Telmo es su impronta histórica, con sus calles adoquinadas y sus casas de época estupendamente restauradas y pintadas de colores. Es un barrio de artistas que conviven con los viajeros del mundo entero que vienen a pasear por sus calles.
Todos los domingos, el mercado de San Telmo atrae a auténticas multitudes por sus puestos de artesanía, sus anticuarios y la célebre milonga en la plaza Dorrego, donde los bailarines de tango se reúnen al terminar la tarde. ¡Te garantizo que estará muy animado!
San Telmo es un barrio idealpara irde compras, tanto en los anticuarios como en las tiendas de últimas tendencias en moda y decoración. Recuerda llevarte pesos argentinos, porque casi no se aceptan los pagos con tarjeta.
Al llegar a Buenos Aires durante mi viaje a Argentina, me bajé del Subte en el tradicional barrio de San Telmo. Estuve alojado allí durante varios días.
Al principio fue ocupado por los colonos españoles, después pasó a ser un barrio residencial burgués y posteriormente, San Telmo se convirtió en una especie de pequeña Italia, tras la llegada de numerosos inmigrantes procedentes del país mediterráneo. Actualmente, se trata de un barrio burgués bohemio, con artistas, anticuarios y bailarines de tango. En los bares que rodean Plaza Dorrego fue donde nació uno de los bailes más sensuales del mundo.
Hoy en día la plaza está llena de vida. Entre los puestos de antigüedades, un guitarrista toca sobre una caja de madera, una pareja baila a ritmo de tango y los turistas disfrutan del espectáculo callejero con los ojos como platos. También te recomiendo que continúes descubriendo el barrio hasta llegar a la calle Defensa y su mercado, repleto de anticuarios.