Ciudad portuaria agradable y aislada en Australia occidental, Esperance toma su nombre de un navío francés que atracó en 1792. Esperance es una etapa, en Australia, fuera de los destinos habituales. Aquí estás lejos de todo, en una magnífica región salvaje.
Aconsejo:
Toma un café en el malecón y saluda a Sammy. Recorre la Great Ocean Drive comenzando por subir al mirador de Rotary. Cálzate bien para el parque nacional de Cabo Grande donde te sentirás verdaderamente afortunado en Lucky Bay (Bahía de la Suerte).
Mi opinión
Si buscas la calma y la belleza salvaje de Australia occidental, ¡entonces ve a descubrir Esperance y sus alrededores! Su nombre es prometedor y no te sentirás decepcionado por hacer todos estos kilómetros en el monte australiano, por una carretera bastante monótona. Rodeada por parques nacionales, la región de Esperance es una de las más bellas que visité. Esperance es la ciudad de vacaciones para los menores de Kalgoorlie. Después de la ruta por el desierto, encontramos un poco de frescor y tranquilidad bajo los pinos, a lo largo de la calle del paseo marítimo. Comprendemos entonces su entusiasmo por venir aquí.
En Esperance, el primer individuo que te recibe es Sammy, el león marino, que no deja el malecón y se relaja a menudo sobre la arena. La estatua, con su imagen, está también colocada justo encima de él, ¡en el pontón! Es cierto, sin embargo, que la ciudad, en sí misma, no presenta un atractivo particular (estéticamente hablando). Encontramos una pequeña pizzería excelente a la orilla del mar, después un pub enorme a donde los lugareños vienen a tomarse una copa por la noche. El albergue de la juventud está situado más al norte, pero también en el paseo marítimo.
Lo más interesante, si te gusta la naturaleza, se encuentra en los alrededores de Esperance. La Great Ocean Drive es una carretera de 34 km que te lleva a las playas de arena fina, a cada cual más bonita, como la de la bahía de Twilight. El trayecto se termina con el lago rosa: Pink Lake. Finalmente, la visita imprescindible en la región, no te pierdas, bajo ningún pretexto, el parque nacional de Cabo Grande, a menos de una hora de carretera desde Esperance: emúes, canguros y playas paradisíacas te esperan. Comencé el descubrimiento del parque escalando Frenchman's Peak, una roca de granito con aspecto de volcán, bajo cuya cima hay una gruta gigante y desde la cual obtenemos una impresionante vista de 360º. Esta montaña es bastante abrupta en ciertas zonas y no hay nada para sujetarse. Una vez sobre la roca, no hay un auténtico camino, pero vi varias personas subiendo en chanclas, ¡así que nada de muy malo! Cuenta, de todas formas, con 2h de ida y vuelta. La bahía de Lucky me dejó atónita; es una de las playas más bellas que pisé en Australia. Arena blanca que cruje bajo los pies (se creería que estamos en la nieve), agua turquesa, canguros que se relajan, esta playa en forma de cala es un remanso de paz donde nos olvidamos de todo. Disfruté de una comida campestre allí antes de proseguir mi aventura en el parque. El punto culminante de mi visita: una puesta de sol sobre las brillantes rocas de Thisle Cove y de la bahía de Hellfire. Volví de mi excursión, la cabeza en las estrellas.
