Mi opinión
Si no estás lejos de Cairns, te aconsejo que vayas a hacer un pequeño recorrido por Kuranda.
Tienes varias posibilidades para llegar allí de forma original, y que te permitirán contemplar las cascadas de Barron: desde Cairns, por el tren histórico que dura 1h45 o en 90 minutos desde Smithfield, en el teleférico.
En Kuranda, en medio de una hermosa y muy bien conservada selva tropical, encontrarás dos mercados artesanales que se funden con el paisaje. Hay de todo: joyas, cerámicas, sombreros australianos, productos de piel de serpiente o de cocodrilo... aunque también alimentos. Aquí podrás encontrar regalos originales.
Me gustó mucho caminar por el pueblo y pasar por los puestos del mercado buscando un tesoro que pudiese comprar. Este lugar es muy agradable, con una actividad artística vibrante, y una atmósfera muy relajada. Hay numerosas galerías de arte que dan prueba de esta actividad, con exposiciones de pintura entre otros aborígenes. Tras hacer tus compras, también podrás sentarte en una de las terrazas de los numerosos cafés del centro de la ciudad. Ten cuidado: todo se cierra a las 16 h y el pueblo se queda desierto.
Si no has cogido el tren, puedes bajar a pie, a 3 km del pueblo está el mirador de las cataratas. (Personalmente las cataratas no me impresionaron demasiado, no tenían apenas agua cuando las ví).
Hay otras actividades que no pude hacer por falta de tiempo, pero que deben fascinar tanto a pequeños como a grandes: la casa de miel, el santuario de mariposas, la granja e koalas, etc.
En definitiva, no dudes en pasar un día en familia en Kuranda, es un lugar ideal para conocer la selva tropical, la naturaleza y hacer un poco de compras en un entorno paradisíaco.
