Durante esta estancia en los Estados Unidos, llegaba de México y San Diego era mi punto de partida antes de subir toda la costa oeste de los Estados Unidos para ir a Canadá.
Mi primera impresión de la ciudad y la que conservo aun después de los años transcurridos es que ¡San Diego en un paraíso de limpieza ! Es necesario decir que venía de pasar un mes en México y los criterios claramente no son los mismos entre los dos países, un contraste cuando menos llamativo. Es verdad que una multa de 1.000 dólares por arrojar desperdicios al suelo, ¡es bastante disuasorio!
También se debe hacer una visita a las playas del Pacífico al final de la jornada. En el momento de la puesta de sol, los surfistas se reúnen y es agradable verlos intentando mantenerse en equilibrio sobre las altas olas del océano Pacífico.